viernes, 26 de diciembre de 2008

viernes, 12 de diciembre de 2008

lunes, 1 de diciembre de 2008

CON SABOR A MANDARINAS


A veces resulta complejo el ordenar los tiempos, sobre todo de lo sucedido hace muchos años, no lo se de cierto, pero no se si hay algun tipo de enfermedad neurologica para olvidar la secuencia de las cosas o que fue primero o que fue despues, pero todo se facilita tomando puntos de referencia que se dan en nuestras vidas y que perduran como un recuerdo fresco por la trascendencia que tienen. Cada quien, creo, le da la importancia debida a sus propios sucesos y las revelaciones que tiene cada uno, dependiendo de sus intereses.
Estoy tratando de relatar algunos momentos vividos durante el periodo de transicion entre la niñez y la adolescencia que vivi, creo, de manera particular en casa de la abuela. Era un mundo maravilloso, lleno de arboles de todos los tamaños, todo parecia inmenso y no quedaba otra que disfrutarse al maximo, pues no teniamos a nuestro alcance los inventos que hoy existen. Pero eso si, teniamos un cine sin techo, a dos casas de la nuestra, por supuesto todos los dias nos la ingeniabamos para entrar a ver la pelicula que presentaran que a diario cambiaban, podria asegurar que toda la "primera epoca" de cantinflas las vi ahi, asi como las de tin tan, los Almada y todos los de antes de que salieran las ficheras, de grata memoria por toda la inspiracion que nos dieron a varios chavitos, para nuestros devaneos onanistas. La mayor parte de las peliculas que veiamos estaban muy deterioradas, eran copias que ya habian pasado por cientos de salas de cine y finalmente llegaban al cine del pueblo. Tambien recuerdo algunas peliculas que se colaban entre todas y que sin una censura estricta, podiamos ver sin problemas, como eran unas peliculas argentinas con una super chava chichonsisima que se llamaba Isabel Sarli, estoy seguro que fueron muchas las ensoñaciones e inspiraciones que se dieron con la imagen de las tetas de Isabel Sarli. Recuerdo ademas una que otra pelicula italiana con Lando Buzanca que para esos tiempos eran lo mas erotico del cine. Acostumbrabamos comprar bolsas llenas de mandarina para comer mientras veiamos la pelicula, hoy en dia, el olor y el sabor de las mandarinas me hace recordar inmediatamente aquellos momentos.
Pero no todo era imaginar, soñar y darle al placer solitario, habia un sinnumero de vecinas y primas que aprendieron y nos enseñaron mas cosas de las permitidas. Coincidencia o no, habia un enorme arbol de guayabo en donde fabricamos una casa rustica, es decir, una casa del arbol, que mas que un lugar de convivencia juvenil y de inocente club, parecia un hotel de paso que estaba literalmente arriba del guayabo. Por supuesto que los avances eroticos eran tibios, sin mucho conocimiento, con temor de muchas cosas, sobre todo a embarazar a la prima o a la vecinita, pues llegamos a creer, todos, que con solo orinar frente a la susodicha, esta podia quedar preñada y si era familiar cercano, podia salir el chiquillo con defectos y formas de animales o algo asi. Los juegos iniciaban con el clasico juego de la familia, en donde regularmente el mas suertudo es el que le toca el papel de papa, pues es el que en teoria, tiene mas derecho de meter mano y hasta de dormir con la "mama"; esa parte era la mas anhelada, me encantaba eso de "dormir" con mi supuesta esposa, pues eso me permitia saber que tan aceptado era por mi "consorte" y de tocarle las piernas, las nalgas y muy timidamente, los senos y la entrepierna. Cuando los juegos se hacian ya por la noche y no podiamos salir al patio para subirnos al guayabo, el "dormitorio" se trasladaba automaticamente bajo alguna cama de la casa, ocasiones que me parecian deliciosas, porque la oscuridad hacia que las cosas se dieran mejor.
No faltaba la vecina que tenia unos años mas de edad, que algunos de nosotros lo que la hacia mas experimentada, recuerdo perfectamente a una chava llamada Violeta que me abrazaba, me tallaba la espalda con sus manos y me pegaba su cuerpo, sintiendo perfectamente sus pequeños senos y su pubis que con el movimiento daba la sensacion de abultarse, sobre mi sexo totalmente crecido y deseoso de estar dentro de la bella Violeta. Por cierto, hace unos años vi una fotografia de una fiesta familiar, en donde esta ella y la verdad, es una mujer muy guapa en su madurez, repeti en mi imaginacion muchos momentos muy cerca de ella y llegue a pensar en buscarla un dia, a ver si podemos repetir algo de lo hecho hace muchos años, no lo creo, pero nada pierdo con hacer el intento.
Despues de esas deliciosas experimentaciones, pasamos a la etapa de los noviazgos "formales", "serios", en donde indiscutiblemente estaba presente un enamoramiento real y en los cuales, el paso mas trascendental en algunos casos, era el saborear los pequeños senos de la amada y eventuales masturbaciones reciprocas que nos permitian saciar nuestras tremendas ganas, sin que la noviecita perdiera la virginidad, todavia.
Muchos fueron los episodios de barrio, con vecinas, noviecitas y alguna conocida que en las fiestas se ponia de modo. Pero la urgencia de sentir lo real, era tremenda. Es asi pues el comienzo de los planes que nos llevaron a estafar a la tia Umbe que nos permitio saber lo que es coger y estar dentro.

continuara...